Un empleado que habría ocasionado un perjuicio patrimonial por más de 1.444 millones guaraníes a la empresa en la cual trabajaba, fue condenado a 4 años de pena privativa de libertad al ser hallado culpable por un hecho punible de Apropiación. Se trata de Albino Prieto Riquelme (43), quien conoció su sentencia este martes 3 de diciembre, durante el juicio oral y público realizado en el Poder Judicial de Ciudad del Este.
El fiscal Deny Yon Pak representó al Ministerio Público y pidió el cambio de calificación de la causa de Hurto a Apropiación. La representación pública produjo varias pruebas documentales y testificales en contra del acusado y solicitó la aplicación de 7 años de pena privativa de libertad. No obstante, el Tribunal Colegiado de Sentencia -conformado por los jueces Zunilda Martínez Noguera, Herminio Montiel y Marino Méndez- consideró razonable la aplicación de la pena de 4 años de prisión.
Según los antecedentes, entre los meses de setiembre y octubre de 2017, se realizaron extracciones de granos de trigo del interior de la empresa Agrofertil S.A., ubicada en el kilómetro 19 de Minga Guazú, por autorización del funcionario Albino Prieto Riquelme, quien era el encargado de controlar el pesaje de camiones, salida y entrada de carga y descarga de granos, de manera exclusiva en el lugar.
El hecho se descubrió cuando la empresa Integral Servicios, encargada de la flota de camiones que realiza el transporte de granos, solicitó el cobro pendiente por servicios realizados por los camiones entre los meses de setiembre y octubre. Esta situación, llamó la atención de los directivos de la firma Agrofertil, considerando que los pagos pendientes correspondían a sábados y domingos (días no laborales en dicha empresa).
Incluso, no obraban documentos respaldatorios referentes a la solicitud de trabajo y tampoco autorización por el Departamento de Granos, requisitos obligatorios para la realización de estos servicios. En consecuencia, la empresa realizó una auditoría interna y constató un faltante de 1.082.630 kilogramos de trigo, que deberían estar almacenados en los depósitos de los 5 silos de la firma, en bolsas plásticas para su transporte y venta. A raíz de ello, la empresa sufrió un perjuicio patrimonial superior a 1.440 millones de guaraníes.