Un hombre atacó al hermano de su exconcubina, un menor de 14 años, y le aplicó 7 puñaladas, supuestamente porque la mujer se negaba a regresar con él. Llamativamente el hecho fue presentado por la Policía como un caso de violación de domicilio, considerando que el agresor se había refugiado en una casa ajena, tras ser linchado por familiares y vecinos de la víctima.
El presunto criminal está identificado como Diego Ramón Villasanti Álvarez (33), quien en el momento de cometer la tentativa de homicidio habría estaba bajo los efectos de algunas estupefacientes, según datos.
El hecho ocurrió en la noche de este domingo 26 de setiembre en un inmueble ubicado en la zona baja del barrio San Miguel de Ciudad del Este. El presunto criminal supuestamente estaba buscando a su expareja, quien minutos antes había salido de la casa en busca de alimentos.
Al no encontrarla en la vivienda, el sujeto atacó al adolescente que estaba acostado en la cama, subió sobre su humanidad y le aplicó supuestamente las sucesivas puñaladas. El menor no podía gritar, pero su hermano de 16 años, quien estaba en otro sector de la casa, se percató del hecho y de inmediato se abalanzó sobre el agresor, sin percatarse que tenía el cuchillo y también sufrió una herida en una de las manos.
El hijo de la dueña de casa, un pequeño de 6 años, fue testigo del ataque criminal. “Esto pasó porque tu mamá no quiso volver conmigo”, le habría dicho Diego Ramón al niño, quien hasta hace poco era su hijastro.
Tras el hecho, Villasanti Álvarez fue demorado y molido a golpes por los lugareños. Pero el mismo, pudo escapar e ingresar a una casa ajena. Allí, fue aprehendido por agentes policiales de la subcomisaría 51ª, quienes fueron alertados sobre su presencia en el lugar. El mismo en todo momento se resistió al arresto.
Curiosamente, en el informe presentado por la Policía ante la Fiscalía -sobre la aprehensión de Villasanti Álvarez- habla solo de violación de domicilio, sin mencionar la tentativa de homicidio contra los menores.
LA TENÍA ATORMENTADA
La expareja del detenido manifestó que hace una semana se separó del hombre porque justamente era muy violento. Refirió que vivían en el Brasil, que Diego Ramón le maltrataba constantemente y que incluso no le permitía visitar a sus familiares.
Dijo que tras regresar a Paraguay, hace una semana, decidió abandonar al sujeto, quien a partir de allí comenzó a perseguirla sistemáticamente, hasta atentar contra la vida de sus hermanos. El sospechado quedó a cargo de la fiscal Cinthia Leiva.
