El fiscal Luis Alberto Trinidad presentó una imputación contra la arquitecta Lilian Elizabeth Soloaga de Hidalgo por los delitos de estafa, tentativa de estafa y extorsión. La investigación se basa en supuestos hechos ocurridos en el marco de un acuerdo firmado por la profesional con una familia para la reforma de una vivienda, que finalmente no cumplió.
Según los antecedentes, el 8 de enero de 2021, la sindicada envió un presupuesto de honorarios para la refacción de una residencia a la ciudadana María Paz Gómez, su madre María Carmela Gómez y su padrastro Kailash Mulchandani. El monto acordado para el proyecto fue de 175 millones de guaraníes, pagados en cuatro partes, con un último saldo que debía realizarse al finalizar la obra. A lo largo de los trabajos, Soloaga se comprometió a realizar diversas tareas, como el diseño arquitectónico, la elaboración de planos y la supervisión de la obra.
La reforma comenzó en enero de 2021, pero el avance de la misma tuvo supuestamente varias demoras y deficiencias. En junio de 2023, después de más de dos años de trabajo incompleto, la familia Gómez se vio obligada a mudarse a la propiedad, a pesar de que la casa seguía sin terminarse. Semanas después, la profesional decidió abandonar el proyecto, alegando maltratos por parte de los propietarios, refiere el escrito fiscal.
Sin embargo, durante ese tiempo, los trabajos en la propiedad eran presuntamente deficientes, con errores estructurales y una falta de terminación en diversas áreas. Luego, a pedido de las víctimas, el 8 de julio de 2023, el escribano Dilson Fulber realizó una constitución en la propiedad y levantó un acta documentando los desperfectos en la obra.
Entre los problemas reportados, se encontraron presumiblemente fallas en el sistema de desagüe, la instalación de vidrios defectuosos y problemas en la estructura de la vivienda. A raíz de estos defectos, la familia Gómez contrató a otra empresa, Hexágono, para completar los trabajos inconclusos. Según un informe, los costos de las nuevas reparaciones ascienden a 140 millones de guaraníes, añade la investigación.
Además, los planos de la obra, por los cuales la arquitecta Soloaga había cobrado 40 millones de guaraníes, fueron rechazados por la Municipalidad de Ciudad del Este. En febrero de 2024, se presentó un informe sobre las presuntas irregularidades en la construcción y la falta de supervisión en la instalación de diversos elementos.
Asimismo, según el acta de imputación, Lilian Elizabeth Soloaga también intentó extorsionar a la señora María Paz Gómez para que le pagara más dinero por los planos y otros servicios que no prestó. A través de un mensaje de WhatsApp, la misma pidió una suma adicional de 250 millones de guaraníes.
Las víctimas declararon que los perjuicios económicos sufridos a causa de la mala ejecución de la obra de la arquitecta alcanzan los 180 millones de guaraníes. La Fiscalía sostiene que los indicios recopilados son suficientes para imputar a Lilian Soloaga por estafa, tentativa de estafa y extorsión.