La Policía y la Fiscalía están detrás de un astuto marginal que creó un perfil falso en Facebook para robar una motocicleta. El hombre se hacía llamar como Daniel en la red social para contactar con la víctima Ronald David Leguizamón Cuevas, quien ofrecía en venta su motocicleta Kenton, año 2020. Tras intercambiar mensajes a través de Internet, acordaron encontrarse en una escribanía para realizar la transferencia. Sin embargo, antes de entrar al local, el delincuente le pidió la llave al vendedor para probar el biciclo en la cuadra, pero jamás regresó y huyó con el rodado ajeno.
Tras el hecho, el afectado realizó la denuncia en la comisaría comisaría 1ª, del barrio San Agustín. En sede policial, Leguizamón Cueva manifestó que también se había comunicado a través del sistema de mensajería Whatsapp con el supuesto autor ladrón, quien habría habilitado el número telefónico exclusivamente para consumar el ilícito. La línea pertenece a la firma Personal y es el número (0972) 895 488. Tras cometer el hecho, el presunto delincuente automáticamente inhabilitó la línea.
LOS ANTECEDENTES
De acuerdo con la denuncia, el 27 de noviembre último, en horas de la mañana, el recurrente se dirigió a bordo del biciclo, marca Kenton, modelo GTR-200, color negro, año 2020, chapa 072 AABT, hasta el microcentro de Ciudad del Este, para concretar el negocio con el comprador.
El malviviente le aguardó a una cuadra del Shopping París del microcentro de la capital del Alto Paraná. De allí, se dirigirían hasta la escribanía Mayeregger para el supuesto traspaso del rodado. Pero, el tal Daniel le solicitó que le lleve hasta unas cuadras del sitio, pues supuestamente había dejado su vehículo sin llavear, conforme le indicó.
Seguidamente, fueron hasta la escribanía, donde Ronald David descendió en ingresó al local para formalizar el contrato de compra-venta. Mientras, el delincuente le pidió la llave de la moto, supuestamente para probar si estaba en condiciones. El ladrón salió del sitio y ya no regresó.
Los investigadores analizan imágenes del circuito cerrado para identificar y someter a proceso al bandido.